Las fuentes orales utilizadas en marcos educativos tienen como propósito ayudar a comprender la complejidad de la realidad social. Desde lo que ocurre dentro de una familia, un barrio o una institución para reconstruir la historia local hasta pensar en problemáticas socialmente vivas. Este tipo de documentos forma parte de las fuentes de información que utilizan las y los científicos sociales para construir conocimiento. Por ello, se considera a los testimonios como un recurso valioso para diseñar propuestas didácticas en el área.